Agro-parques y tecnología: El futuro del campo poblano de la mano de Alejandro Armenta

En pleno 2024, el campo mexicano se enfrenta a nuevos retos, y en Puebla, el gobernador electo Alejandro Armenta tiene un plan claro para hacerle frente. Con su programa “Transformemos el Campo Poblano”, no solo se trata de mejorar lo que ya existe, sino de poner la tecnología al servicio de los pequeños y medianos productores, y con ello, cambiar el panorama agrícola de la entidad.

Si bien la agricultura en Puebla siempre ha sido una columna vertebral de la economía local, la visión de Armenta apunta a algo más moderno y ambicioso: diversificar los procesos y traer la agricultura al futuro, todo con un enfoque que combina lo rural y lo urbano. «Queremos fortalecer la soberanía alimentaria, pero también dar un paso hacia la tecnificación del campo», dijo en una reunión con productores poblanos.

¿Qué implica «Transformemos el Campo Poblano»?

Este programa estatal está alineado con la política nacional de la presidenta Claudia Sheinbaum y su Programa Nacional de Soberanía Alimentaria. Se trata de una estrategia conjunta que busca no solo producir más, sino hacerlo mejor. ¿Y cómo lograrlo? Con tecnología.

Para empezar, Armenta tiene en mente la construcción de 10 agro-parques estratégicos en Puebla. Estos espacios serán centros de producción agrícola tecnificada, que estarán conectados con la Productora de Semillas del Bienestar, una iniciativa que comenzará su labor en Zacatecas y que, en una primera etapa, abarcará la producción en Durango y Nayarit, para luego extenderse a otras entidades, incluida Puebla. Esta red de agro-parques y productores estará apoyada en técnicas avanzadas de riego, energía solar y cosecha de agua, haciendo más eficiente cada etapa del proceso.

Pero no es solo una cuestión de infraestructura. El programa también contempla la capacitación constante para los productores, acceso a financiamiento y créditos que les permitan modernizar sus métodos. Es decir, no solo se trata de producir más frijol (cuyo cultivo alcanzará las 763 mil hectáreas con proyección a una producción de 300 mil toneladas anuales), sino de asegurarse que estos cultivos sean más rentables y sostenibles.

El campo poblano: del campo tradicional a la agricultura urbana

Algo que destaca del plan de Armenta es su apuesta por la agricultura urbana. No se trata solo de seguir los viejos caminos, sino de crear nuevos. Y es que con el uso de tecnologías como los paneles solares y la tecnificación del riego, Armenta quiere reducir los costos de producción. Esto permitirá que incluso en zonas urbanas se puedan implementar pequeños huertos que contribuyan a la soberanía alimentaria.

Además, la propuesta incluye el uso de energía renovable, lo que permitirá que la agricultura en Puebla no solo sea más eficiente, sino también más amigable con el medio ambiente. Este es un paso importante, no solo para fortalecer la capacidad de producción de Puebla, sino también para alinear las políticas locales con los compromisos ambientales nacionales e internacionales.

Un campo poblano más fuerte y soberano

Todo esto es parte de una visión de largo plazo que busca convertir a Puebla en un referente en cuanto a producción agrícola y soberanía alimentaria. La idea es clara: menos dependencia de insumos externos y más autosuficiencia.

Con el apoyo de la Productora de Semillas del Bienestar, que abarcará territorios como Chihuahua, San Luis Potosí, Chiapas, Puebla, Veracruz y Guerrero, se prevé que se logre una cobertura más amplia y una producción más eficiente de frijol de alta calidad. La meta final es alcanzar un millón de toneladas en poco tiempo, algo que fortalecería no solo a Puebla, sino al país entero.

Con esta estrategia, el gobernador electo está dibujando un futuro en el que el campo poblano se moderniza, sin perder de vista las raíces de los pequeños y medianos productores. Porque al final del día, lo que está en juego no es solo la producción, sino también la capacidad de mantener viva la tradición agrícola, pero con una mirada puesta en la innovación.